Código y nombre. 0349-21: Formación y fortalecimiento en pensamiento crítico, ética y epistemología para investigación, docencia y enseñanza.
Responsable. Máster Andrés Gallardo Corrales.
Participante: Doctora Rocío Zamora Sauma.
Vigencia. 19 de julio del 2021 al 31 de diciembre del 2024.
Resumen
La actividad tiene por objetivo el diseño, desarrollo e implementación de diversos módulos, en los campos de pensamiento crítico, ética, y epistemología, ya sea para investigadores, docentes y estudiantes de la Universidad Nacional, así como para estudiantes, académicos y funcionarios de otras instituciones que requieran un fortalecimiento de las habilidades y contenidos asociados a estos campos.
Objetivos
General
- Diseñar e implementar módulos de capacitación en pensamiento crítico, ética, y epistemología para investigadores, docentes y estudiantes dentro y fuera de la Universidad Nacional.
Específico
- Diseñar e implementar un módulo de capacitación (actualización profesional) en pensamiento crítico para docentes e investigadores de la Universidad Nacional.
- Diseñar e implementar un módulo de capacitación (actualización profesional) en ética de la investigación para investigadores de la Universidad Nacional.
- Diseñar e implementar un módulo de capacitación (actualización profesional) en epistemología para investigadores de la Universidad Nacional.
- Implementar un módulo de capacitación en lógica y pensamiento crítico para docentes del Ministerio de Educación.
- Diseñar un módulo de capacitación para el equipo estudiantil de debate de la Universidad Nacional en el campo del razonamiento y pensamiento crítico.
- Diseñar e implementar, en conjunto con la Vicerrectoría de Docencia, una módulo de aprendizaje en el área de comprensión lectora dirigido a la población estudiantil.
- Diseñar e implementar un módulo de actualización profesional de ética, producción e investigación dirigido al área disciplinar de las artes.
Justificación
La necesidad de actualización y el fortalecimiento de contenidos y habilidades en el campo del pensamiento crítico, la ética y la epistemología para investigadores, docentes y estudiantes se ha convertido, en el contexto actual, en una exigencia académica y profesional de carácter prioritario, especialmente en el marco del desarrollo de habilidades y competencias exigidas en las sociedades de la información. Los parámetros éticos de la investigación y la docencia, la capacidad en la resolución de problemas o los alcances y límites de los conocimientos producidos, son solo algunos de estos elementos centrales para las áreas señaladas.
El pensamiento crítico, en tanto habilidad cognitiva, está muy relacionada con nuestras capacidades lingüísticas (cfr. Jasso Méndez, 2020), las cuales podemos ampliar y extender de diversas maneras. El desarrollo de pensamiento crítico se relaciona con la comprensión de temas, la capacidad de explicarlos y ordenarlos, así como con la habilidad de resolver problemas conceptuales, lógicos o prácticos (Jasso Méndez, 2020, p. 523). Un elemento central del pensamiento crítico lo constituye también la habilidad para realizar inferencias. Todos estos son elementos que puede ser mejorados mediante procesos educativos, a través de prácticas dirigidas al ejercicio del razonamiento y de la argumentación, principalmente por medio de los campos de la lógica y la resolución de problemas.
Por otra parte, la ética de la investigación científica y académica se relaciona tanto con las prácticas y conductas correctas en el desarrollo de teorías e investigaciones (reguladas frecuentemente por códigos éticos), como con la valoración ética de las condiciones y repercusiones de estos conocimientos en el marco amplio de la sociedad, es decir, con el impacto de la aplicación de las teorías y de las investigaciones. Hoy, es ampliamente conocido, que las prácticas científicas, investigativas y docentes se desarrollan en el marco de intereses, problemas y acciones intencionales específicas y que, por tanto, están guiadas, en última instancia, por una gran diversidad de valores y de normas. Estos sistemas amplios dentro de los que se produce la ciencia y la investigación son susceptibles de valoración moral. Desde esta perspectiva, la ciencia y la tecnología no pueden ser consideradas como “actividades neutrales” (Cfr. Gallardo, 2020). El debate, la discusión y la actualización en estos contenidos se vuelve fundamental para las diversas comunidades académicas.
Asimismo, el manejo de los fundamentos epistemológicos de la investigación confiera claridad respecto de los alcances y limitaciones de estos procesos investigativos, con lo cual pueden enriquecerse las perspectivas, enfoques e incluso la metodología de los programas de investigación.
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